Afganistán, del optimismo al realismo
Ana Ballesteros | 17 Abr 2014
Mucho se ha hablado del desencanto de los afganos con las instituciones democráticas y el proceso electoral. En las elecciones de 2009, el nivel de fraude fue tan alto, que la sombra de ilegitimidad oscureció la última legislatura de Hamid Karzai. Ya entonces, algunos daban por muerto el éxito de futuras elecciones. Éstas, no obstante, han probado ser lo contrario. Si los cálculos son ciertos, el 58% de una estimación de 12 millones de votantes, acudieron a las urnas. Sin embargo, no es más que una valoración hecha sobre otra. Sin censo de población ni registro electoral, podemos estar celebrando el triunfo de las estimaciones, eso sí, corroboradas por los comentarios de observadores y medios de comunicación. El recuento provisional da a Abdullah como ganador, con un 41,89% del voto, seguido por Ashraf Ghani Ahmadzai, con el 37,60% y de lejos, Zalmai Rassoul, con 9,83%.