Los tres retos del nuevo gobierno de Turquía

Fuente: 
El Mundo
Fecha de publicación: 
03 Nov 2015

La izquierda kurda está inquieta por la mayoría absoluta islamista del domingo. "Empezaron una guerra, mataron a 500 personas y detuvieron a dos mil, quemaron bosques... Para nosotros esto fue un chantaje", critica, en conversación con EL MUNDO, el ex diputado del pro kurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP) Faysal Sariyildiz. Aunque el HDP entró en el parlamento, el Partido Justicia y Desarrollo (AKP), al que acusan de desestabilizar Turquía para ganar votos, venció. A pesar de su victoria, estos son los retos que debe asumir para devolver la estabilidad al país:

El conflicto kurdo

La imagen de desestabilidad parece haber aupado al AKP, que prometió ley y orden durante la campaña. Cumplir esta promesa pasa por estabilizar el incendiado conflicto kurdo. En el sur, Diyarbakir, uno de los distritos donde la guerrilla kurdoturca PKK fomentó recientemente rebeliones tornadas en batallas urbanas, no auguran nuevos choques. Creían que éstos los había provocado el mismo gobierno y que ahora, que ya no los necesita porque ha ganado, no incurriría en ellos.Disturbios en Diyarbakir tras la debacle de los pro kurdos en las elecciones turcas.

La ruptura unilateral del alto al fuego del PKK, tras el ataque del IS que mató a 33 activistas en Suruç, conllevó que el presidente Recep Tayyip Erdogan metiese en la nevera el proceso de paz. La lectura de la mayoría de analistas es que el discurso del miedo al "terrorismo" kurdo ha arrastrado el voto conservador a las urnas, y sirvió la mayoría absoluta del AKP en bandeja. Con la victoria en el saco y en posición de fuerza el AKP dio ayer señales de disposición de volver al diálogo.

El arquitecto del proceso de paz es el AKP, y el futuro está ligado al AKP. Este gobierno fuerte va a resolver uno a uno todos los problemas acumulados", asegura el ex viceprimer ministro Besir Atalay. Para los optimistas esta situación devolvería la partida al pasado febrero, cuando se firmó una hoja de ruta de diez puntos, entre el ejecutivo del AKP y el HDP, para poner fin al conflicto armado kurdo. No obstante, Erdogan siempre se mostró crítico con aquel acuerdo.

Estabilizar la economía

El segundo gran reto para el nuevo gobierno es el de estabilizar la economía. La bolsa de Estambul y la lira turca, que había caído un 25% este año, subieron notablemente ayer. La moneda local turca subió un 4% respecto al dólar hasta ponerse a 2,8 al cambio. El principal índice bursátil de Turquía logró cotas positivas del 5,5%. Acotar la caída de la lira, afrontar las próximas reacciones de la FED estadounidenses y reformar un modelo económico que flojea son las próximas misiones del AKP.

"A corto y medio plazo será importante ver quién se encarga del Ministerio de Economía y del Banco Central. La elección de nombres de confianza para los inversores puede ayudar", opina el economista turco Emre Deliveli. El analista destaca nombres para la cartera de Finanzas como Ali Babacan o Mehmet Simsek, ambos ex ministros y artífices del progreso económico turco de los últimos años. Deliveli advierte, sin embargo, que Erdogan puede interferir negativamente en esta cuestión.

"Hay economistas próximos al presidente que no son académicos como Yigit Bulut -polémico ex asesor del jefe de Estado-, cuya elección puede sembrar la desconfianza entre la clase inversora", dice Emre Deliveli.

 

El poder de Erdogan

Uno de los ejes de debate estos días va a ser cómo se va a bascular la influencia de Recep Tayyip Erdogan sobre el gobierno. No es un secreto que el mismo presidente ha elegido los candidatos a diputado que pronto se sentarán en el hemiciclo. Sin embargo, los resultados del domingo no le permitirán que una reforma Constitucional, aprobada unilateralmente por el AKP, instaure el sistema presidencialista que él desea.

 

Fuente: http://www.elmundo.es/internacional/2015/11/02/5637c037268e3e015c8b4672....

Autor: Lluís Miquel Hurtado