El golpista ex jefe del Estado Mayor turco y Presidente hasta 1989,Kenan Evren, ha muerto este sábado a los 97 años en Ankara, la capital de Turquía.
Evren será recordado por el brutal golpe de Estado de 1980, por el que cumplía cadena perpetua, en el que se ejecutó a cincuenta presos y se detuvo a medio millón de personas. También por haber fundado la Constitución que sigue vigente en Turquía y por propugnar una ideología política islamonacionalista viva hoy día.
El 12 de septiembre de 1980, Kenan Evren anunció la tercera toma castrense del poder civil en la historia republicana turca. Justificó la asonada alegando que había de acabarse con los enfrentamientos callejeros entre facciones de años previos, que habían dejado ya 5.000 muertos. A finales de la década de los 70, grupos de extrema derecha y de extrema izquierda habían tomado los centros urbanos a fuego.
Los militares aseguraron representar la unidad nacional contra el comunismo, el fascismo, el separatismo y el sectarismo religioso. Evren abolió el Parlamento y el ejecutivo, suspendió la Constitución y prohibió todos los partidos políticos y sindicatos. Tras el anuncio las detenciones se prodigaron. Unas 650.000 personas fueron arrestadas. 299 murieron torturadas o por la vida en prisión. Uno de los ejecutados tenía 16 años.
A pesar del régimen marcial impuesto, numerosos ciudadanos,hartos de las continuas reyertas en las calles, suspiraron aliviados. También EEUU, cuya administración Carter vio con buenos ojos el golpe. Sigue debatiéndose el papel de los militares turcos, apoyados por unidades clandestinas al servicio de la CIA, alentando aquella tensión social previa para presentarse luego como el remedio para hacer tabula rasa.
Al shock inicial le siguieron tres años de dictadura corporativista. Se puso bajo control la prensa, la disidencia fue enviada a prisiones en islas del mar de Mármara y los uniformados prepararon Turquía para introducirla de pleno en la economía global. El objetivo era establecer un rígido espacio político, limitar al máximo las libertades individuales y socavar cualquier eventual oposición al proyecto neoliberal.
El eco del golpe de 1980 aún resuena. La Constitución que Kenan Evren sometió a votación en 1982 - con sobres transparentes y gendarmes en cada urna - sigue vigente. La imposición del umbral del 10% de votos para entrar en el Parlamento, con el que Evren quería poner coto a partidos kurdos e islamistas, es el obstáculo para que el pro kurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP) tenga representación en las generales del próximo 7 de junio.
A fin de dar forma a un régimen aceptable para el islamismo, muy agitado tras décadas presionado por el secularismo tradicional, Kenan Evren preconizó la llamada 'síntesis turco islámica'. Consistió en la introducción en la esfera pública del Estado de conceptos islámicos, como la moral religiosa y la herencia califal otomana, para sostener un nuevo régimen autoritario y supremacista turco. La herencia de este concepto sigue vigente.
En junio de 2014, tras anularse la cláusula constitucional que los blindaba de toda responsabilidad, Kenan Evren y su mano derecha, Tahsin Sahinkaya, fueron condenados a cadena perpetua por el golpe. Desde marzo de 2012, Evren estaba bajo tratamiento hospitalario en la Academia Médica Militar de Gülhane. Según la prensa local padecía de Alzheimer.
En las últimas semanas su estado había empeorado.
Lluis Miquel Husrtado
Fuente: http://www.elmundo.es/internacional/2015/05/10/554e82feca47419e088b4571....
