Luciano Zaccara | 29 Abr 2017
El primer debate presidencial del 28 de abril de tres horas de duración giró en torno a los temas sociales y culturales. Organizado a partir de 12 preguntas distribuidas por sorteo entre los seis candidatos –Hassan Rohani, Mohamad Baqer Qalibaf, Ibrahim Raisi, Eshaq Jahangiri, Mostafa Mirsalim y Mostafa Hashemi Taba -, con un tiempo fijo para respuestas y comentarios, el debate no aclaró los programas de ninguno de los candidatos en estos aspectos, aunque sí delineó cuál será el eje principal de discusión a lo largo de la campaña: Rohani, Jahangiri y Hashemi Taba, por un lado, y Qalibaf, Raisi y Mirsalim por el otro.
En primer lugar, Qalibaf demostró ser el más férreo crítico de la administración Rohani, y quizás el candidato más serio del espectro conservador para intentar evitar la reelección del actual mandatario. En al menos un par se momentos ambos se enzarzaron en un intenso intercambios de palabras, con un presidente acusando a Qalibaf de mentir y tergiversar las anteriores promesas electorales de Rohani.
Qalibaf centró sus intervenciones en el “96% de población desposeída”, frente a los privilegios del “4%” restante, justificando la política de subsidios implementada en la anterior gestión de Ahmadinejad, a quien le reconoció, sin nombrarlo, su preocupación por los pobres.
También quedó claro, generando incluso el único momento risueño del debate, que Jahangiri participará de los debates más como escudero de Rohani y defensor del programa de gobierno que como candidato en sí mismo. Jahangiri ocupó todo su tiempo remarcando los logros de la actual gestión en temas medioambientales y sociales, replicando las acusaciones de Qalibaf con críticas a su gestión de la alcaldía de Teherán, mientras que Rohani se defendía de lo que consideró “las tres calumnias” de Qalibaf durante el debate.
El otro candidato del espectro reformista, Hashemi Taba tuvo un papel discreto, sin criticar al gobierno, más bien apoyando el papel del reformismo en la administración pública, pero tampoco sin entrar en disputas con los tres candidatos conservadores.
Los otros candidatos, Mirsalim y Raisi, tuvieron un perfil demasiado bajo como para decidir el apoyo de los diversos grupos conservadores en favor de alguno de los dos, y en ningún momento pusieron en apuros ni a Rohani ni a Jahangiri. Con tres candidatos, junto a Qalibaf, que se disputan el voto conservador, éste último parece haber demostrado más empuje en entablar la batalla a la actual administración. Llama la atención, al menos en este primer debate, que Raisi no haya demostrado por qué tanto se ha hablado de él en las últimas semanas, y cómo espera atraer a los votantes críticos con Rohani. En sus dos minutos finales de conclusión cuestionó por única vez a la actual administración por las promesas incumplidas, y aseveró que tenía un “plan para generar un millón de puestos de trabajo”, pero sin más detalles.
Los próximos debates serán el 5 de mayo (Política) y 10 de mayo (Economía). Es de esperar que a partir de las encuestas de opinión alguno de los candidatos conservadores se retire de la contienda para favorecer una candidatura única, aunque nadie aún ha acordado que lo haría. En el ámbito pro-gubernamental, es de esperar que Jahangiri se retire una vez terminado el tercer debate presidencial.
El debate completo está disponibles doblados en español en los siguientes enlaces.
Primera parte https://www.youtube.com/watch?v=eWGdk-K2h7k
Segunda parte https://www.youtube.com/watch?v=RzLspcYWMEE
Tercera parte https://www.youtube.com/watch?v=DgUHDErEl8Q
Cuarta parte https://www.youtube.com/watch?v=IB2GKPuCCvA